another dream

Estábamos yendo al centro de Lima con todas las mucas, pero luego Lili y yo nos separamos del grupo y nos fuimos volando (literalmente volando) hacia la Plaza de Acho. A Lili ya se le notaba la panza de Elenis. En el sueño, la plaza estaba en un lugar bonito y limpio, y tenia unas rejas con guardianes para pasar. Y no te cobraban entrada. Hacías una colita, te revisaban “por aquí pasó” las bolsas, te daban un pase de visitante, que era para colgárselo al cuello y entrabas.

Antes de ir al coso, Lili y yo decidimos ir al baño XD, que estaba a un lado, subiendo unas escaleras. Pero habia una cola muy larga. El baño era igual a los que hay en los supermercados o los cines, nuevo, bonito y limpio. Nos quedamos afuerita, yo saqué marihuana de mi mochila y Lili me trataba de enseñar como liar un troncho con un pedacito de hachis… pero no me salía.

En eso, se apagaron todas las luces, se encendieron circulinas rojas y empezó a sonar una sirena. Toda la gente salió corriendo. Yo me asusté porque pensé ¡policía!, y yo con merca en la mochila XD, y salí corriendo a esconderme, Lili se me perdió de vista.

Cuando bajé las escaleras, el lugar ya no era limpio y bonito, era mas bien como una selva, y habia callejones que llevaban a descampados llenos de barro, y había sajinos y sachavacas pastando ahí O.o. Finalmente vi que había gente escondiéndose en un hueco, y yo también quise entrar, pero no me dejaron, pero por no dejarme entrar rápido, los guardias que estaban circulando, descubrieron el escondite y los sacaron a todos.

Fuimos llegando al centro de la plaza, donde habían montado una construcción de cañas, parecida a un castillo de esos pirotécnicos que queman en las fiestas patronales, solo que este era gigantesco y aguantaba el peso de las personas. Estaban amarrando a la gente ahí, algunos a nivel del suelo, otros más arriba. Tenía varios niveles.

Allí me di cuenta que la plaza de Acho, en el sueño, funcionaba como Coliseo Romano y la tortura y quema de esas personas era el espectáculo que toda la gente había venido a ver. Me amarraron a mi también, al nivel del suelo, y me dieron un golpe en la espalda, que pareció de juego, porque en realidad no me dolió. Todavía estaban preparándolo todo.

La busqué a la Lili con la mirada y la vi estaba frente a mi, bien sentadita, esperando para ver el show. Tons que le grité para que viniera a ayudarme, ella me vio y se acercó y me dijo ¡¿pero que haces ahí mujer, si te van a matar?!, y yo le dije, me atraparon por error…y ella, pero diles que tienes tu pase. Entonces yo grité y vino una guardia mujer, yo le dije, estoy aquí por error, mire, tengo mi pase. Y ella vio que en mi cuello llevaba mi pase de visitante. Yo pensé que le iba a valer, pero me soltó y me dijo, “Pero para qué te metes, pues”. Y dijo en voz alta, “fue una confusión, es una visitante”, y como nos habíamos asustado, ya Lili y yo nos fuimos sin ver nada. A la salida me encontré un gusiluz y fui feliz.