Y que Kaan es imbécil y no me hace caso. Y fue a buscar a Beno al sitio donde le habia visto el otro día. Y que resulta que si lo encontró. Y fue sólo el muy tarado. Y que le dice que hay que salir a conversar, ya tu sabe de qué.
El Beno se lo quiere hacer fácil y le dice vete, ya le prometí a ella que no te voy a hacer nada.
Pero Kaan es un bicharraco envalentonado y le dijo, afuera, vamos a hablar. Y salieron.
- ¿Porqué? Te conozco wey, te hice algo yo para que hagas eso.
- Me insultaste.
- No, tú me insultaste. Nos humillaste. A mi mujer, y mi familia y al Xibalbá. Ella no quería que viniera a buscarte, le tuve que mentir.
-Ella solo pedía por tí. Cómo lo has conseguido?
- Conseguí que?
- Que te ame. Ella no confiaba en nadie, no amaba a nadie. Ni tan siquiera a Andrek. Quién eres tú y qué le has hecho. Que te hace especial?
- No sabes? no te han contado todavía los chismes que se dicen de mí en el astral méxica? La basura que dicen de mi?
- Escuché algo. Algo raro.
-Andale, qué te dijeron.
- Que en realidad... ni siquiera eres un hombre.
- Te dijeron la neta. No lo soy, O sí, y no, a la vez. Quieres ver?
- Ver?
-Te muestro lo que soy. Y se quitó el disfraz, mostrando... pues lo que es. Qué te parecio? Tu princesa Coatlaxopeuh se casó con esto. Y ella lo sabe, y lo acepta. Y nos ama, porque somos dos, mi hermana y yo, juntos, en un solo cuerpo. Y sabes que se le dió una oportunidad para dejarnos, y la rechazó. Se quizo quedar con nosotros para siempre. Qué te parece? Ahora sí, adiós.
- Te vas?
- Ya no tengo nada más que hacer wey. Ya te maté.
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- Y yo no le puse los cuernos al Kaan!
- Eres igual a tu madre
- Yo amo a mi esposo! cosa que ella no hacía!
- No me faltes el respeto!
- No querías deshacerte de Kaan, no que lo despreciabas y tal, ahora lo defiendes? Tu un poquito ya lo quieres verdad papá? Kaan se parece a tí.
- Si no lo vas a matar, entonces respétalo.
- Y lo hice!. Papá, Beno es un asesino! No quiero que dañe a Kaan, ni en astral ni en real, por eso le metí floro que lo hice cachudo voluntariamente para que se resignara y se quedara tranquilo, o de últimas que se la agarre conmigo. Prefiero que me odie a que le hagan daño. Papá, está mal eso? Que quiera proteger a mi esposo?
- Entonces, no le pusiste el cuerno?
- Que nooooo!
- Ah bueno. Entonces estamos en paz. Un beso, mijita. Y no te preocupes, cuando lo tenga a tiro al tipo lo mato.
- Tan lindo siempre, papá.