Yo bien tranqui y chill en mi casita, la que era de Kiki, en serio seguía limpiecita. Y en eso... El intenso.
- Pero qué haces acá, Jay?!
- Qué hago? Vine a buscarte! Estaba preocupado por tí, Porqué sigues yéndote sin avisarme?
- Jay, no tiene mucho misterio dónde estoy, si no estoy allá estoy acá.
- Mis hermanas te hicieron sentir mal, fueron malas contigo. No tenían derecho, no dejaré que te vuelvan a molestar.
- Tus hermanas me hicieron entrar en razón, Jay. Lo mejor para tí es que te deje y me quede a vivir aquí.
- No te puedes ir solo así!
- Era un matrimonio de hecho, Jay. Si me voy, se termina.
- La tribu lo aprobó.
- Y la tribu lo anulará apenas tus hermanas digan que no puedo tener hijos.
- Ya te dije que eso a mí no me importa!
- Pues debería importarte. Sabes qué Jay, vete a tu casa, por favor. Lo pensé mejor, ya no volveré con los iroqueses.
- Pues me quedaré aquí contigo entonces.
- No hagas el ridículo, Jay.
- Estar enamorado de tí es hacer el ridículo? Dame una oportunidad, te amo.
- Jay, eres joven, se te va a pasar. Cásate, ten tus hijos y en menos de lo que te des cuenta, te habrás olvidado de mi. Tienes un futuro por delante.
- Y para qué quiero tener hijos con una mujer que no voy a amar? Para qué quiero una familia mientras soy infeliz?
- No se puede razonar contigo.
- Le voy a pedir tu mano formalmente a Ah Puch.
- Estás demente! No te puedes acercar a mi padre. Eres el hijo del último cuerno que le puso la Cihua! Si te ve, te matará.
- Pues que me mate. Dónde lo encuentro.
- No voy a facilitar tu suicidio, Jay.
- No me lo vas a decir? Le preguntaré a Kaan.
Y ni tiempo me dió de responder, el wey desapareció ante mis ojos. Ni modo, lo tuve que seguir a la casa de Kaan.
Cuando llegué Kaan lo estaba saludando de abrazo, feliz de verle, le presentaba a Huitzin y Jay le daba un beso en la mejilla.
- Jay!
Todos me voltearon a ver.
- Luz!... Es cierto dijiste que estabas viviendo entre los iroqueses, me saludó Kaan.
- Conmigo, Kaan. Lupita estaba viviendo conmigo. Justamente vine a pedirte que me lleves con tu padre Ah Puch. Yo la amo y...
- Cállate Jay!! Lo interrumpí. No vas a hacer nada. Vas a regresarte por dónde viniste y harás lo que tú tribu quiera que hagas.
- A ver, qué es ésto? Te quieres casar con Luz?! Pero en qué momento te enamoraste de ella?!
- Lo siento, Kaan. Me enamoré de ella a primera vista, el día mismo que la conocí, cuando fuiste con ella a mi casa y me la presentaste como tú hermana y tu esposa.
- WTF? Se me escapó decir.
- Obviamente no dije nada, era la esposa de mi hermano. Luego la vi con Quicré, y lo mismo. No voy a dejar que se me escape de nuevo. Yo te entiendo a tí, Kaan, te obligaron a dejarla y luego, apareció ésta bella dama, sonrió a Huitzin, que es básicamente parte de tu mismo ser. Pero Kiki es un imbécil.
- En eso estamos de acuerdo, Quicré es un imbécil, dijo Kaan. Por eso nunca me gustó que estuviera con Luz, nunca confié en él y tenía razón, es una mala persona. Pero tú, Jay... Eres otra cosa. Sabes, de la maldición?
- Sí sé, Lupita misma me lo contó. Yo la quiero igual.
Kaan se quebró y abrazó llorando a Jay.
- Tenía miedo de que ya nadie la querría, y que se quedara sola, me preocupaba tanto que nadie cuidaría de ella.
- Kaan, no soy discapacitada o algo así, para necesitar que alguien me cuide!
- Sabes a lo que me refiero.
-Lupita, qué tienes en contra de mi? Dime qué no te agrada, y haré lo que pueda por mejorar.
- No me agrada, que me pusiste una trampa para casarte de hecho conmigo según las costumbres iroquesas sin que siquiera yo me diera cuenta.
- Que hiciste qué?! Se indignó Huitzin.
- Eso no estuvo bien, Jay.
- Fue idea de...
- La Cihua. Pinche vieja culera, todas sus ideas están mal. Si no quieres terminar siendo un mierda como Quicré, no tienes que hacerle caso jamás!!
- Lo sé, no lo volveré a hacer. Sé que estuvo mal, estoy arrepentido, por eso quiero hacer las cosas bien.
- Harás las cosas bien, le dijo Kaan. Yo te acompañaré a ver al viejo calavera para que no te mate. Pero no le vas a pedir la mano de Luz. Tú llevarás enamorado de ella 5 años, pero ella apenas se divorció hace dos meses. Le vas a pedir su permiso para cortejarla, y te vas a volver para tu casa después de eso, okey, Jay?
- ... Okey, Kaan.
- Huitzin quédate con Luz. Acompáñala a su casa. Ya vuelvo. Luz... Dale una chance a Jay, es un gran tipo.
Claro que es un gran tipo. De hecho, el mejor tipo con el que me he tropezado hasta ahora.